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Mil años, una cripta, un mosaico, y el relato de la vida de Domingo García

Santo Domingo de La Calzada celebra el Milenario del Nacimiento del santo

Los muros de la cripta de la catedral de Santo Domingo de la Calzada, que hasta ahora mostraban la piedra desnuda de sillería, albergan ya una serie de mosaicos ilustrados que cuentan diferentes escenas de la vida del santo y de la iconografía religiosa. La intervención lleva la firma del prestigioso artista esloveno -experto en el arte del mosaico- Marko Rupnik y se ha convertido en el primero de los regalos a Domingo García, en la celebración del Año Jubilar con motivo de la celebración del Milenario de Santo Domingo.

Quince miembros del equipo de Marko Rupnik trabajaron de forma minuciosa en la creación de las imágenes que forman los mosaicos diseñados por el artista esloveno. Escenas que representan momentos de la vida del santo, así como imágenes de la iconografía religiosa cristiana. Al recorrer los muros que rodean el sepulcro puede identificarse: la Sagrada Familia, el santo peregrino, la leyenda de la gallina que cantó después de asada, el bautismo, el cordero y la eucaristía, la Virgen sedente con el niño, los Reyes Magos el santo y los monasterios, la fundación de la ciudad y el impulso al Camino de Santiago.

Marko Rupnik ha trabajado también en la ornamentación de la Puerta del Perdón de la Catedral de Santo Domingo de La Calzada, actuación emprendida también de forma previa a la celebración del Año Jubilar con motivo del Milenario del Nacimiento de Domingo García, santo Domingo de La Calzalda (1.019). Marco Rupnik (Zadlog, 1954), sacerdote, teólogo, escritor y artista especializado en motivos y piezas religiosas -mosaicos, bronces y vidrieras- Rupnik está considerado uno de los artistas de mayor prestigio en materia de arte religioso. Dirige desde 1993 el taller de vidrieras del Vaticano, donde en 1999, concluyó los trabajos en la capilla ‘Redemptoris Mater’ del Palacio Apostólico de la Ciudad del Vaticano. Rupnik ha dejado también su firma en la iglesia de San Giovanni Rotondo, o los santuarios de Fátima y Lourdes . En España, Rupnik ha trabajado en la capilla del Santísimo de La Almudena. A su estilo creativo se le atribuyen influencias del arte bizantino en la configuración de mosaicos, así como de Kandisky y de los artistas expresionistas.

La Puerta del Perdón de la catedral de Santo Domingo de La Calzada ocupará el vano simétrico al acceso principal al templo, que permanece sellado históricamente desde su construcción.El diseño de la Puerta del Perdón de la catedral de Santo Domingo pretende romper con la ya existente, con el fin de dotarla de un sentido actual. La idea de los responsables del templo es que la Puerta del Perdón tenga carácter alegórico, que ‘se pueda leer’, al estilo de otras puertas de nueva confección ‘abiertas’ en diferentes catedrales. Por ejemplo, las existentes a la entrada de la Basílica de San Pedro del Vaticano y en diferentes Basílicas Mayores de Roma. El equipo de Marco Rupnik ha esculpido en brocen las ilustraciones que representarán, en tres niveles sobre la estructura de madera de olmo, la parábola del ‘Hijo Pródigo'.

La Puerta del Perdón, que se abre oficialmente el 25 de abril, cuenta con dos ‘ventanales’ a diferente altura, permitiendo que niños y personas con movilidad reducida contemplen el interior de la catedral con facilidad desde el exterior cuando la puerta permanezca cerrada. Los ventanales permitirán contemplar el mausoleo de Santo Domingo desde la plaza.

Marco Rupnik trabajó con anterioridad en el catedral de Santo Domingo de la Calzada. El pasado mes de agosto creó e instaló la nueva vidriera del muro oeste del tempo, situada sobre la conocida como Puerta del Cristo. Una vidriera de diseño contemporáneo en el rosetón y que da continuidad a la tradición que define el fin de las vidrieras como vehículo para santificar la luz natural que entra en un espacio sagrado.

La nueva vidriera de la catedral de Santo Domingo representa el ‘Don del Espíritu Santo’. En el centro se observa la mano de Dios Padre que envía su fuerza bajo el símbolo de las llamas de fuego, que se comunica a los hombres a través de los siete sacramentos, representados en el resto de las escenas. La imagen central es una alusión a la Epíclesis -nombre que recibe en la celebración de la misa la parte que se dedica a la invocación del Espíritu Santo- y representa la mano del Padre que derrama el Espíritu Santo.

La roseta de la nueva vidriera tiene un diámetro de 317 centímetros y 8 centímetros de segmento en diseño único. La subestructura de soporte cuenta con 317 tubos de acero korten. El vitral consta de dos cristales de 6 milímetros de espesor. Cristal templado sobre un cristal de aislamiento térmico. El diseño del vitral está realizado en pintura cerámica. La celebración del Milenario del Nacimiento de Santo Domingo de la Calzada se prolongará hasta el 12 de enero de 2020./J.M.

* VISITA LA GALERÍA DE IMÁGENES DEL MOSAICO QUE RECORRE LA CRITPA.