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{DEPORTE / BALONCESTO}

'Con 87 puntos de media hemos sido los máximos anotadores de Europa'

Jesús Sala Entrenador del Clavijo Knet de Logroño

Jesús Sala lleva ocho años en el banquillo del Clavijo Knet, el equipo de baloncesto de Logroño, que le han permitdo definir el estilo de juego en el que cree; un baloncesto en el que defiende la idea de "correr y buscar rápido la canasta", siempre que haya buenas posiciones, aclara. Un estilo que asegura "permite divertirse y ganar". Disfruta al mismo tiempo de su trabajo en la Federación Española como entrenador ayudante del seleccionador, Juan Orenga, en la SUB20, con la que consiguió el oro europeo el pasado verano. El Estudiantes de Pinone, Herreros, Orenga, Winslow y Azofra le contagió la fiebre por el baloncesto. Años después las décimas no bajan; siguen subiendo. Jesús Sala lo achaca a la cantidad de acciones y decisiones que hay que tomar en poco tiempo, a la velocidad del juego. Ahora, su equipo no sólo ha consolidado un estilo que cuenta con el respaldo de la afición, sino que comienza a apuntar alto en la clasifición. Sala cree que el deporte de competición es un estado de ánimo en el que hay que tener los pies en el suelo.


Spoonful. ¿Cómo empieza su relación con el baloncesto? ¿Cuál es el primer recuerdo?

Mi afición al baloncesto surgió gracias, sobre todo, a mi tío Pedro; él fue quien me llevó a mis primeros partidos. Con el, en al Palacio de los Deportes de Madrid, fue donde me aficioné al baloncesto y al Estudiantes. Junto a é tlambién comencé a ver NBA, 'Cerca de las estrellas', la época de Dominique, Bird, Magic, Jordan...

 

S. ¿Coincidió con el baloncesto de la plata de ‘Los Ángeles’ o se enganchó después?

Me enganché después. En esos juegos yo tenía sólo 7 años y la verdad no creo ni que hubiera visto un partido de baloncesto. Fue después. Mi primer equipo fue el Estudiantes de Pinone, Orenga, Winslow, Azofra, Herreros, ese fue el primer quinteto que realmente me aficionó, aunque también era un gran fan de Fernando Martín y sus luchas con Norris. Y tiempo después he tenido la suerte de coincidir con Juan Orenga en la selección.

 

S. A finales de los años 80 y comienzos de los 90 comienza a llegar la NBA a España… ¿Qué influencia le concede en la explosión de la afición del baloncesto?

Yo creo que en muchos casos la NBA de los 80, tras la Plata de Los Ángeles, fue el factor decisivo en el crecimiento de la pasión por el baloncesto en España. Era un baloncesto muy atractivo, con auténticas estrellas. Recuerdo que casi todos los amigos teníamos no sólo un equipo, sino también un jugador favorito.

 

S. ¿Y la vocación de entrenador?

Con 13 años comencé a jugar al baloncesto y al año siguiente ya comencé a entrenar niños más pequeños, de eso hace ya mucho tiempo y obviamente cometiendo muchos errores; puedo decir que llevo veinte años entrenando baloncesto a mis 34 años.

 

S. A otros niveles, pero conozco a un bueno número de jugadores (ligas autonómicas y locales en los años 80 y 90) que dieron el paso a ser entrenadores… ¿Qué engancha tanto de este juego?

No sabría decirte la verdad, creo que tiene algo que ver con la cantidad de acciones, decisiones que se toman en poco tiempo, la velocidad del juego. Obviamente cuando ves baloncesto de máximo nivel te llama mucho la atención la espectacularidad de las acciones, es por eso que la NBA ha abierto mucho camino. Pero se crea un vínculo que hace que jugando, entrenando, la gente quiere seguir disfrutando del basket.

 

S. Quizá… la posibilidad de intervenir en el partido, de compartir más con los jugadores cada jugada qué en otros deportes…

Cuando eres un niño, quieres jugar y si uno juega al fútbol por ejemplo y no es de los buenos, pues sucede que pasas partidos y partidos en el banquillo. En baloncesto, hasta la normativa ayuda a que eso no pase obligando en categorías de formación a que los niños deban jugar un mínimo de uno o dos cuartos, puede que influya a que los niños prefieran el baloncesto cuando lo practican de pequeños.

S- ¿Sobre qué piezas se sustenta un equipo? Hay quien dice que son imprescindibles un buen base y un buen pivot… ¿lo comparte?

Base, alero y pívot, uno por puesto, ayudan a tener un nivel de competitividad alto, ahora depende de si hablamos de formación o competición; en formación no deberían existir esas diferencias y se debería entrenar buscando que todos hagan de todo, la temprana especialización no es buena.

 

S. ¿Hay estilo en el baloncesto? ¿Se puede innovar o está todo inventado?

Imagino que hay muchísimo inventado, pero siempre hay gente brillante que consigue tener nuevas ideas. En cualquier caso, creo que repetir ideas no es malo siempre que uno sea capaz de ser crítico y adaptar esas ideas al equipo que uno entrene.

 

S. Hoy todo el mundo habla del estilo del ‘Madrid’, correr y anotar. Les salga bien o mal los marcadores suelen ser elevados y el público se divierte… ¿Es el camino para llevar más gente a los pabellones y espectadores a la televisión?

Yo llevo ya varios años creyendo en un estilo rápido y agresivo en ataque, el año pasado nos llevó a ser uno de los equipos más anotadores en Europa y de cara al espectador tengo claro que ayuda a fidelizar al que viene al pabellón, la gente quiere ver a su equipo ganar pero también quiere disfrutar de un gran partido. Nos equivocamos si creemos que el espectador quiere tanteos de 50 ó 60 puntos.

 

S. Un documental, creo que titulado ‘El sistema’ relata un sistema de juego de un equipo universitario los ‘Loyola Marymount’. El entrenador, Paul Westhead, apostaba por correr y tirar a canasta (si era de tres mejor), posesiones de siete segundos… ¿Es ese el baloncesto que reclaman los espectadores?

Yo creo en correr y en buscar la canasta lo más pronto posible, pero siempre que sean buenas posiciones de tiro, porque esa forma de juego trabajada te puede ayudar a ganar y a disfrutar, esa idea de tirar en menos de 7 segundos puede servir a corto plazo, pero a largo plazo tus aficionados te exigirán ganar. Ahora, si uno cree en una forma de juego y consigue que su equipo crea en ella, puede terminar por conseguir victorias.

 

S. ¿Te gusta ese baloncesto (quizá no al extremo de los ‘Loyola’?

Me gusta y lo aplico, como te he comentado antes, el año pasado fuimos el equipo más anotador de la Adecco Plata con 87 puntos de media por partido (en Oro Murcia fue el mejor con 83 y en ACB fue el Caja laboral con 79,2), este año promediamos 80 de media pero seguimos con la misma idea de jugar un baloncesto alegre y ofensivo.

 

S. Por el contrario, en los últimos años parece que ha triunfado la otra opción ‘tanteos bajos?

Yo creo que los entrenadores tendemos a querer controlar mucho lo que sucede en la cancha, el trabajo de scouting y de defensa ayuda a ello, aparte de buscar un juego organizado donde se busque a los referentes del equipo en sus zonas de mayor capacidad ofensiva. Es entendible pensar que esa es la mejor manera de ganar, que al final es por lo que se mide el trabajo del entrenador. Da igual si juegas de una manera u otra, hay que ganar.

 

S. ¿El estilo, el mejor sistema para un equipo se consigue con paciencia, permitiendo trabajar y confiando en el equipo técnico? Tus ocho temporadas en el Clavijo son la prueba…

En el Clavijo se ha creido en mi trabajo desde hace muchos años y eso me ha permitido equivocarme, aprender de mis errores y poder trabajar en mejorar. Sé que en este mundo soy un privilegiado, en mi caso concreto, estos años me han ayudado a crear una idea de juego que busca la creatividad del jugador y les da mucho protagonismo, pero es la confianza la que te permite a veces arriesgar. 

 

S. El equipo no para de crecer y los jugadores personalmente también, ¿Hasta dónde? ¿Hay límite o se puede soñar?

Llegaremos hasta donde nuestro trabajo nos lleve. Hemos conseguido un ambiente de trabajo donde creo que el jugador mejora y una idea de juego que les permite jugar con cierta libertad. De momento creo que podemos seguir creciendo y mientras haya un reto tendremos ilusión. Este año estamos cerca de conseguir la permanencia, que era nuestro objetivo esta temporada, y el día que lo logremos estaremos muy felices.

 

S. Hay quien dice qué el deporte, la competición, es un estado de ánimo… ¿Si es así, el Clavijo parece jugar con un gran ventaja?

Yo creo en ello y por eso intento que aprendamos a disfrutar con lo que hacemos, quiero que mis jugadores disfruten de su trabajo, de jugar, de entrenar, yo lo hago. A veces no es sencillo pero hay que aprender a relativizar las situaciones de estrés competitivo y no dejar que minen tu ánimo. Me gusta cuando alguien me dice que se ve buen ambiente en mi equipo, en un entrenamiento o en un partido y me gusta saber que mis jugadores quieren continuar.

 

S. ¿Cómo motiva a sus jugadores? Recurre en ocasiones a la música, al cine…

No suelo hacer cosas excepcionales, más que nada intento actuar en los estados de ánimo. Muchas veces es después de una derrota cuando el entrenamiento debe ser menos estresante y en cambio después de una victoria cuando hay que apretar las tuercas. Depende muchas veces de lo que el equipo me transmita. A nivel individual depende de cada jugador, con algunos hablo muy poco y, en cambio con otros, intento tener más comunicación porque veo que lo necesita o lo demanda.

 

S. Le gusta el cine… ¿Una película sobre baloncesto? ¿Una qué sirva como ejemplo de la constante superación del Clavijo?

El cine me encanta y el cine sobre el deporte y sus hazañas aún mas. Creo que hay muchas películas cuyo mensaje o cuya historia es aplicable o es un ejemplo para muchos equipos y entrenadores. A mí en concreto me marcó hace muchos años una película documental que se llamaba 'Hoop Dreams'. Relata la vida de un par de jugadores de baloncesto de high school en USA (14-15 años), de los mejores de su edad, estrellas en el instituto y con un gran futuro. Contaba su vida durante varios años y es un buen reflejo para darse cuenta de que por muy bueno que seas hay muchos obstáculos que superar, es muy difícil, por eso hay que intentar no obsesionarse, trabajar con ilusión, pero sin olvidar que uno nunca sabe lo que va a suceder mañana. Eso es precisamente lo que nos tiene que hacer disfrutar del momento. Luego hay películas míticas como 'Hoosiers', 'Coach Carter', 'Titanes', 'Un domingo cualquiera'. o la última que he visto, 'Moneyball', me gustan todas ellas, cada una con su temática. 

 

S. Medalla de oro en el Europeo con la selección SUB20. Parece claro que la Federación está trabajando bien. ¿Qué jugadores le sorprendieron más? Mirotic fue la estrella del torneo, pero la sensación es que había unos cuantos jugadores más de alto nivel…

Llevo cuatro años con la FEB y me siento un privilegiado por ello, he logrado cuatro medallas, tres bronces y un oro, lo que explica el nivel que tenían los jugadores que formaban esas selecciones, auténticos talentos como Mirotic, Franch o Sastre este año por hablar de los que más protagonismo han tenido en ACB. Muchos otros jugarán mucho tiempo y serán importante en sus equipos. Tengo mis favoritos, jugadores que me han ganado por su capacidad de trabajo y sacrificio pero me los guardo por respeto al resto. 

 

S. Para terminar, ¿un deseo para 2012?

Que mejore un poco la situación del basket, la gente del baloncesto se lo merece.


 

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